A todos nos gusta una sonrisa perfecta y unos dientes blancos, pero sobre todo debería importarnos que esté sana. En la boca existen centenares de bacterias distintas, si quieres tener una salud bucal perfecta tienes que cuidarte cada día. Los hábitos de higiene bucal son imprescindibles para prevenir enfermedades como la caries, la gingivitis y la periodontitis, entre otras.
Para llevar a cabo una buena higiene bucal, en Parafarmacia Filipinas queremos darte unos consejos para conseguirlo. Una de las partes más importantes de la higiene bucal es eliminar le biofilm bucal o placa bacteriana. Se produce en la superficie del diente y en la lengua, algunos elementos nos ayudan a eliminarla de manera correcta. Se trata de productos que protegen los dientes y las encías con beneficios para tu higiene bucal.
Hábitos diarios para tu higiene bucal
Cepillarte dos veces al día: esa es la cantidad mínima recomendada. Lo mejor sería hacerlo después de cada comida y al menos durante 2 minutos. Es básica la utilización correcta tanto de un buen cepillo de dientes como de una pasta dentífrica adecuada. Hay que observar cómo estos utensilios se adaptan a nuestras necesidades y también las características de nuestra boca.
Limpieza entre los dientes: está recomendando al menos una vez al día para conseguir una buena higiene bucal. Se emplea seda o cinta dental para llegar a cualquier espacio que el cepillo no logra limpiar. En los lugares más estrechos se suelen utilizar los cepillos interproximales.
Colutorio bucal: su uso diario funciona como un método complementario para que la lucha contra la placa sea eficaz. Sus componentes deben adaptarse a tus necesidades y ser antibacterianos para prevenir cualquier enfermedad en la encía. También tener flúor para ayudar a que no aparezcan caries, entre otras afecciones.
Irrigador bucal: otra opción para tener una buena higiene bucal es el uso de irrigadores bucales. Se trata de aparatos eléctricos que aplican un chorro de agua u otra solución directamente sobre los dientes. Ayudará a la eliminación de las bacterias de la superficie de los dientes, de las encías o los espacios interproximales.